Una de las primeras imágenes que vienen a nuestra mente cuando hablamos de Blanes es la preciosa Sa Palomera. Muchos han descrito Sa Palomera como un sitio que dota de personalidad propia a Blanes y desde luego, uno de los lugares más visitados.
De hecho, al pasear por el famoso paseo marítimo de Blanes es casi inevitable fijar nuestra vista en la peculiar roca solitaria. Siempre está allí ejerciendo de fiel guardia natural y al mismo tiempo dividiendo la playa de Blanes con la playa de S’Abanell.
El inicio de la Costa Brava.
Sa Palomera, ante todo destaca en el paseo marítimo al separar la bahía de Blanes, siendo el lugar considerado como el punto donde la Costa del Maresme y la costa brava se fusionan.
En el caso de la Costa del Maresme, es el punto donde acaba y al mismo tiempo es el Inicio de la Costa Brava. De hecho, este sitio durante décadas fue considerado como un puerto natural por sus características naturales.
El origen de su nombre se debe a un tipo de cuerda denominada La Palomera, que era muy utilizada para poder arrastrar a las barcas de los pescadores locales hacia la playa.
Conociendo la famosa Sa Palomera.
Sa Palomera es una enorme roca inmersa en el mar, y como hemos mencionado anteriormente separa la bahía de Blanes. En dicha separación por la parte norte está la bahía de Blanes, y hacia el sur la playa de Sabanell, dentro de lo que es actualmente el término municipal de Blanes.
Son muchos los atractivos de visitar Sa Palomera. Uno de estos atractivos son los islotes adyacentes y el fantástico mirador desde el que podrás contemplar una perspectiva preciosa de la población y el río Tordera que tiene su desembocadura unos 2 km más abajo.
El mirador es uno de los sitios más visitados por los turistas en Blanes. No sólo por las fantásticas vistas sino por la formación natural del propio mirador, en la cima de Sa Palomera.
Asimismo, el montículo donde se encuentra Sa Palomera también es muy utilizado para realizar festivales y eventos. En dicho montículo, podrás apreciar el emblemático arco metálico que tiene una forma de “V” invertida. El arco es un símbolo de la puerta que da la bienvenida a la Costa Brava.
Subir a Sa Palomera.
Al llegar a Sa Palomera y contemplar ese Peñasco a lo alto, el siguiente impulso es el de subir a la gran Roca. En realidad, el acceso es muy sencillo, ya que desde el paseo marítimo donde están las antiguas casas de pescadores, se encuentra la entrada donde pasaras por el arco que da inicio la costa brava.
A partir de allí espera una subida de unas 30 a 40 escaleras que son un tanto empinadas. Aunque tiene sus respectivas barandillas para llegar hasta lo alto. Es un sitio bastante frecuentado por locales y turistas, con lo cual observaras mucha gente bajando y subiendo por las escaleras o tomándose fotos en la cima.
Por esta razón, si quieres disfrutar de paz, tranquilidad, tomar fotos con mayor tranquilidad o escuchar con total silencio las aguas de Blanes, es recomendado ir muy temprano o a última hora. Eso sí, el atardecer desde la cima de Sa Palomera es alucinante.
Subir a Sa Palomera con niños.
Durante el ascenso a Sa Palomera, debes tener cuidado si vas con críos pequeños. Aunque las escaleras cuentan con barandillas, muchas tienen huecos que pueden ser peligrosos para los más pequeños.
Además, por ser una roca muy resquebrajada por el paso de millones de zapatillas y zapatos, hay que ir con mucho cuidado. Es muy frecuente resbalar o tropezar en el trayecto. Así que si quieres visitar Blanes con niños y subir a la cima de Sa Palomera, lo mejor es que los lleves de la mano y tengas mil ojos sobre ellos.
“La Roca Sa Palomera”: Icono del turismo en Blanes.
En la base rocosa de Sa Palomera verás a muchísimos pescadores apostados en las rocas, y también a muchos humanistas con su tubo y gafas de buceo para hacer snorkel, descubriendo el fondo marino en los bordes de la gran roca.
Si eres amante del snorkel, podrás disfrutar de esta actividad en uno de los lugares más turísticos de Blanes. Por otra parte, es todo un deleite a la vista contemplar las aves que se posan sobre las rocas y el fantástico ambiente playero de la zona.
Al inicio hemos mencionado lo interesante de asociar un destino con una imagen. En el caso de Blanes, su línea costera tiene un protagonismo absoluto por su gran formación rocosa de Sa Palomera, que es la imagen de Blanes sin ninguna discusión. Si decides viajar a Blanes, debes conocer este precioso lugar y disfrutar del ambiente, las preciosas vistas y el entorno maravilloso de la zona.
